Los flechazos existen. No tienen ningún sentido racional, suceden y ya está. Sin previo aviso, sin marcha atrás, sin margen a la duda.
Quien duda de su existencia simplemente es que no ha experimentado ninguno… aún.
A mí sí me ha pasado, varias veces además. Algunos los he contado en este blog y estoy aquí para contaros otro: el que he sufrido con la Banda Sonora de la película Begin Again
Mientras veía la película (muy recomendable) ya estaba completamente sumergida en la historia musical, el hilo conductor en torno al que gira todo el argumento y después… no puedo parar de escucharla.
Me invaden diversos sentimientos cuando la estoy escuchando, la pena, la energía, el entusiasmo, la necesidad de soledad… ¡¡y sin entender inglés!! jeje. Es la magia de la música.
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